El verano es sinónimo de diversión al aire libre, días de playa y piscinas, pero también de una mayor exposición al sol, lo que puede representar un riesgo para la piel de tus hijos.
La piel infantil es más delicada y susceptible a los efectos nocivos de los rayos UV, por lo que es fundamental tomar medidas para protegerla y prevenir daños a largo plazo. En Caribella, te compartimos las mejores recomendaciones para mantener la piel de tus hijos saludable durante la temporada de calor.
1. Protección solar obligatoria
El uso de protector solar debe convertirse en un hábito diario. Opta por un protector solar de amplio espectro con un SPF de al menos 50 y resistente al agua. Aplícalo 30 minutos antes de la exposición al sol y reaplica cada dos horas, especialmente después de nadar o secarse con una toalla.
2. Ropa adecuada y accesorios
Elige ropa ligera para tus hijos, de colores claros y con protección UV. Los sombreros de ala ancha y gafas de sol con filtro UV son esenciales para proteger la cara y los ojos de los niños. En la playa o piscina, considera el uso de camisetas con filtro solar para mayor protección.
3. Evitar las horas de mayor radiación
El sol es más intenso entre las 10:00 a. m. y las 4:00 p. m. Durante este período, es preferible buscar sombra o realizar actividades bajo techos cubiertos. Si la exposición al sol es inevitable, refuerza las medidas de protección con protector solar y ropa adecuada.
4. Hidratación constante
Las altas temperaturas pueden llevar a la deshidratación, lo que afecta la piel y el bienestar general de los niños. Asegúrate de que consuman suficiente agua a lo largo del día y complementa su alimentación con frutas y verduras ricas en agua, como sandía, pepino y naranja.
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